Para decir "Con Dios", a mi me sobran los motivos (también)
Qué mala leche tiene esto de la vida, gensanta. Estaba en el trabajo viendo cómo acababan de ingresar mi mísero sueldo. Eran las 17:00 y ahí estaba otra vez, sólo pensando en echarme una siesta y mandar al cuerno a toda la hipocresía, bobería y tontería que había a mi alrededor.
Y en esto que entra "él". Un tío con éxito, un político de biberón que va subiendo y subiendo. Vida resuelta tío. Papi papi, papi chulo y poderoso que te ha dado todo y te protege, cuida y mima para que en breve trinques.
Le he visto irse en su coche, de marca, y he mirado al mio. Que no es mio, que es de mis padres porque si me pago un coche me quedo sin sueldo.
Y he pensado en su futuro y he pensado en el mio. Pero he pensado en lo tonto que era el pobre y en que yo creía no serlo tanto. "Pobre pero decente, pobre pero no tan tonto"
Y he cogido el periódico, he visto al fulano de Marbella con los 10 móviles y con todo el dinero del mundo. Inevitablemente he pensado en si llegaría el "hijo-de-papi" a concejal de urbanismo.
Tal vez el tonto sea yo, y mierda, mañana sonará otra vez el despertador. Y tendré que cogerlo, porque si no lo cojo me echan. Y si me echan el único camino será otro trabajo similar con un sueldo misero similar.
El tonto soy yo. O somos nosotros si prefieren acompañarme en el sentimiento. Sabina, cantame argo...
1 Comments:
Me gusta tu artículo. Escribiría algo más pero me voy a poner con el mío asi que...
Abrazo.
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