Las dos Españas
Un debate sobre el Estado de la Nación centrado en las diferencias de los dos partidos mayoritarios. Lo que supone un aumento de las diferencias de los casi 20 millones de votantes (habría que hablar de la legitimidad del sistema) que tienen ambos partidos. Esta postura, o impostura, que se arrastra desde el fatídico 14-M está empujando a los ciudadanos a una confrontación sobre las premisas que defienden sus líderes, bueno más que defender repiten una y otra vez para convertirlo en verdad incuestionable.
Pero lo realmente patético no es este nuevo “media España se resiste a morir”. Lo realmente estúpido de los dos partidos que alternan en el poder es que ideológicamente no se diferencian en nada, o casi nada, y en lo práctico ambos están involucrados en la extensión de la mundialización capitalista. Por eso podemos decir que se trata de la misma mierda con diferentes moscas.
Después de haber dicho esto me gustaría simplemente abogar por la teoría de Saramago en su Ensayo sobre la lucidez y pediros que a partir de ahora si realmente no nos convence lo que los políticos dicen, que parece harto difícil que lo hagan, votemos en blanco y provoquemos en cierta medida una crisis en el sistema, la crisis más peligrosa para el poder establecido: la pérdida de legitimidad que tanto presumen haber conseguido en las urnas. ¿Qué pasará cuando no cuenten con esa legitimidad?
Seguro que se inventan algo para que su forma de gobierno, su medrar, se mantenga gracias a los Medio de Comunicación de Masas, desde la burocracia más oscura o desde la represión y el miedo. Algo encontraran para mantenerse en ese rincón calentito para lo elegidos que es el poder.
Pero podría pasar algo realmente maravilloso, que los dos grandes partidos interesados en mantener la confrontación de las dos España que tantos votos les dan dejen esa dinámica para mantener el bien común, pero el de ellos, y lleguen a una postura consensuada entre ellos para mantener la continuidad de su poder, pero el de ellos, y no el de la soberanía nacional.
6 Comments:
Bajo coacción me dispongo a hacer un comentario sobre Las dos España de JLuna.
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¶ Buff, que pereza escribir ahora, lo hago mejor luego. Sólo una cosa, ¿por qué todo lo centras en el capitalismo?... En este caso, no veo que "lo realmente estúpido de los dos partidos que alternan en el poder es que ideológicamente no se diferencian en nada, o casi nada, y en lo práctico ambos están involucrados en la extensión de la mundialización capitalista"?.
La diferencia si la veo, pero no centra en el capitalismo, aunque sí en lo "calentito" del poder.
Los políticos no son cualquier tipo de mierda. Son una mierda especial, dotados de un cierto pedigrí. Dentro de esta mierda de altos vuelos hay especificidades también, porque hay mierda dictatorial y la hay elegida, como ésa a la que te refieres.
Creo en la necesidad del "político", ahora bien, en la conveniencia de que exista el ciudadano "político" y no el del administrado que delega todo lo "político" en alguién que lleva por nombre este adjetivo.
En este sentido, las dos Españas no existen, porque lo que existe en realidad son dos partidos que monopolizan el poder en nuestra mal llamada democracia. A esto se le llama Oligocracia. Españas en realidad hay tantas como naciones es este país: 4.
En cuanto a Saramago, hay una frase sintomática que engrandece aún más el libro ...
alguien se la sabe ?
Saludos LuNa.
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Para que exista ciudadano político tiene que haber ciudadanía, y lo que hay en esta país, y me incluyo, es masa. La ciudadanía es un concepto que implica cierta formación e interés por los asuntos políticos. Mientras no exista ciudadanía, amplia, existirán las dos Españas porque se ve lo que los políticos dicen, a través de los Mass Media. El sistema, aunque no nos guste, funciona.
La frase no la sé, enciende las luces.
Un saludo amigo, yo tengo las esperanzas puesta en gente como vos.
"Puede suceder que un día tengamos que preguntarnos: ¿Quién ha firmado esto por mí?". Sara Mago (sic) (como diría la 'célebre e intelectual' presidenta de la Comunidad de Madrid, Doña Esperanza Aguirre).
Al margen de esta cita de Ensayo sobre la lucidez de José Saramago, con la que estoy muy de acuerdo, creo que, en realidad, España no existe. Existe la lengua española, la cultura española, la tradición, la gastronomía, ..., pero no la Nación. O si la hubiere, ¿por qué habría de ser la verdadera? Yo podría sentirme celtíbero, godo, romano, andalusí, vasco, catalán, gallego, castellano, aragonés, francés, ... Fueron tantos los que pasaron por aquí, por esta península Ibérica multicultural, que no está muy claro de dónde venimos. Eso nos hace grandes.
La bandera roja y güalda es sólo un invento. La Corona, las dos columnas y el escudo son meros símbolos oportunistas. El himno no tiene ni letra.
En definitiva, no existen dos Españas, ni cuatro tampoco. Existen 44 millones de maneras de entender la forma de agruparse en torno a una 'piel de toro', dos ciudades autónomas y dos archipiélagos. Eso podría ser España, si es que es algo.
Bien leído !!
Por añadidura diré que lo de Saramago es literatura al servicio de causas politizantes con estilo, sin caer en la pornografía social de autores como León de Aranoa, y eso que me gustán sus películas. Un saludo y un abrazo enorme, compañero.
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